Hablemos acerca de los Sacramentos:
¿Qué es un Sacramento?
Es un encuentro de amor entre Dios y los hombres por medio de su Hijo Jesucristo. Es un signo visible de instituido por Jesucristo por medio del cual se da la gracia, se fortalece la fe, se rinde culto a Dios, y se realiza la santificación de los hombres.
Para comprender mejor esta definición hay que tener bien claro lo que es un signo...
Veamos:
Fácilmente nos entendemos con otro cuando comprendemos lo que dice y él también nos comprende. Cuando las palabras son claras y conocidas y los signos y gestos se pueden entender.
Me entenderías claramente y sin pensarlo mucho si te dijera por ejemplo: “¡me quedé sin fluido de electrones anoche!”; ó “¡el conector de mi dispositivo de impresión está averiado!”; o bien “¡tengo una acumulación de ácido láctico en mi extremidad inferior izquierda!”
Cuando nos hablan en un lenguaje que no acostumbramos de seguro nos va dificultar más poder entender, pero si habla sencillo y explica claro, entonces sí se entiende.
Dios habla con sencillez:
Dios, que es infinitamente sabio, ha decidido comunicarse con nosotros. El nos habla como amigos y nos recibe en su compañía. Su palabra es la misma que decimos cuando hablamos entre nosotros; sus gestos son fáciles de entender.
Así es como Dios Padre se comunica con nosotros: mediante una palabra que El nos dirige y que comprendemos y respondemos, y unos signos que nos dan a entender lo que Dios nos concede y lo que espera de nosotros.
¿Qué es un signo?:
Sólo conocemos las realidades espirituales a través de lo que vemos, tocamos, hacemos, oímos... un signo es una manifestación visible (algo visible) que nos muestra una realidad invisible, ¿qué cómo? vemos un ejemplo:
No vamos a decir que el primer dibujo es el amor o el segundo es la paz, pero ciertamente nos traslada de inmediato a pensar en eso. Por eso podemos decir que el corazón es un “signo” del amor y “la paloma” un signo de la paz.
Nuestra vida está rodeada de símbolos que nos hacen pensar en algo más allá de lo que ven nuestros ojos: una luz roja nos indica ALTO, el gesto de arrodillarse a orar nos indica ADORACIÓN, SUMISIÓN, HUMILLACIÓN, la rosa que nos regalan habla del AMOR que nos tienen, incluso los rótulos…
Los signos pueden ser gestos, palabras, personas, objetos, lugares.
Un signo es pues, algo visible (que podemos tocar, palpar, ver, escuchar, percibir) y que nos manifiesta (nos lleva a pensar) en algo invisible (un sentimiento, un valor, una gracia, …)
En los sacramentos nos encontramos con Dios:
Entonces entendemos que los sacramentos son encuentros de Dios con nosotros, por medio de su Hijo Jesucristo.
Los sacramentos son caminos para llegar al encuentro; son formas de realizar el encuentro; son fuente de gracia y bendición que Dios derrama en favor de nosotros; son oportunidades diversas en las que nosotros, escuchando a Dios, podemos revisar nuestra fe y reafirmar nuestros compromisos con Él.
Cada sacramento lo hace de manera diferente:
- El Bautismo es el sacramento que nos hace nacer a la fe; su signo principal: El agua derramada en la cabeza de quien se bautiza junto a las palabras: Yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
- La Confirmación nos da la fuerza para ser testigos de la fe; su signo principal: Es el Santo Crisma que el Obispo o su delegado unge en la cabeza del confirmando.
- La Reconciliación nos lleva al encuentro con Dios misericordioso que perdona nuestras faltas; su signo principal: la mano que el sacerdote impone sobre quien se confiesa mientras le da la absolución y bendición.
- La Eucaristía es el sacramento en el que celebramos y revivimos la obra de nuestra salvación en la Muerte y Resurrección de Cristo; su signo principal: Son las especies del pan y del vino que el sacerdote consagra en el momento en que repite las palabras de Jesús en la Santa Cena.
- La Unción de los enfermos alimenta la esperanza y fortalece frente al dolor de la enfermedad y la muerte; su signo principal: es la unción con el santo óleo acompañada de la fórmula correspondiente.
- El Orden Sacerdotal consagra a algunos al servicio de los bienes espirituales de los hermanos; su signo principal: la imposición de manos que hace el Obispo sobre el ordenando, a la que sigue la oración solemne de consagración.
- El Matrimonio bendice el amor humano en la familia y fortalece la fidelidad y la responsabilidad; su signo principal: las palabras de mutua entrega y aceptación que los esposos se dicen, mientras se toman de la mano. Ellos mismos son los ministros del sacramento.
Todos los sacramentos son encuentros con Cristo, pero cada uno nos ofrece la gracia de una manera especial, (gracia sacramental) de acuerdo con lo que es el sacramento, a nuestras necesidades y nuestra misión cristiana.
Debemos saber que los sacramentos producen su efecto, pero nosotros, cuando los recibimos, debemos tener una conducta que responda al regalo de Dios y a lo que Él espera de nosotros.
Para recibir dignamente los sacramentos es necesario:
- Recibir el sacramento y estar dispuesto a cambiar de vida (conversión).
- Saber cuál es la gracia especial que Dios nos quiere dar por ese sacramento y estar dispuesto a abrir el corazón a Él.
- Tener en cuenta que cada vez que un cristiano recibe un sacramento adquiere un nuevo compromiso delante de Dios y de la comunidad cristiana.
Sería indigno de un cristiano considerar los sacramentos como ritos mágicos.
Por eso, tenemos que mirar siempre si estamos bien preparados, bien dispuestos, para que la gracia que Dios nos concede no caiga en terreno estéril, con el riesgo de no dar buen fruto, porque nosotros mismos no lo permitimos.
Debemos cooperar con Dios, respondiéndole con amor al amor que Él nos tiene.
Pero hay más: después de haber recibido el sacramento, nuestra cooperación a la gracia de Dios debe continuar, porque los beneficios recibidos deben ser cuidados y practicados por nosotros en una vida recta y fiel, cumpliendo con el compromiso que hicimos con Dios y viviendo en su presencia y a su servicio
Veamos ahora cada Sacramento:
INICIACIÓN: Bautismo, Eucaristía, Confirmación
SANACIÓN: Reconciliación, Unción de los enfermos
SERVICIO: Orden Sacerdotal, Matrimonio
